Después de pasar el invierno pasado por teatros como el Galileo o la sala Kubik, Orphans ha visitado este año las tablas del Teatro del Barrio. Se trata de un texto de Dennis Kelly que dirige Roberto Cerdá y protagonizan Carles Moreu, Nuria Aparicio y Rafael Rojas donde se ponen sobre la mesa temas como la desigualdad social, la violencia, el racismo y donde no faltan la dependencia, el miedo y la manipulación sentimental.
En una noche tranquila, Helen y Danny están celebrando la noticia de su segundo embarazo. Se encuentran disfrutando de una cena intima cuando se ven interrumpidos con la entrada a la casa de Liam, el hermano de Helen. Una visita inesperada que esconde un misterio y que hará florecer un sinfín de sentimientos, recuerdo y reflexiones sobre un pasado, un futuro incierto y un presente que ninguno de los tres desea pero del que son presos.
La escenografía, muy sencilla, representa ese salón en el que cenan Helen y Danny y donde se desarrollará toda la acción. Huerfanos nos enfrenta a una familia aparentemente normal pero donde enseguida vemos que la relación entre los tres se mueve entre la desconfianza, la envidia e incluso el desprecio. La obra avanza con un ritmo pausado pero en el que la tensión, que es palpable desde el primer momento, va incrementándose continuamente y donde se pone de manifiesto los distintos puntos de vista de cada uno. En seguida queda claro que los dos hermanos son muy manipuladores y acaban llevando la situación a un callejón sin salida donde acaban perdiéndolo todo y provocando mucho dolor, incluso a si mismos.
Muy interesante el trabajo de los tres actores manejando los tiempos en esta larga noche que no parece tener fin y donde afloran muchos temas que le hacen pensar a uno sobre sus propias dudas y sus propios miedos.