UNA VIDA ROBADA
"Una vida robada" es un texto de Antonio Muñoz de Mesa, la obra tiene como fondo la trama real de los bebes robados en España entre los 60 y los 90. Luz (Ruth Gabriel) llega a la casa del doctor Nieto (Carlos Álvarez-Nóvoa) buscando una verdad que acabará trastocando a todos. Olvido (Asunción Balaguer) es la encargada de velar por el doctor y sus secretos y por último Julio (Liberto Rabal) el hijo del doctor. Se trata pues de explorar el tema de la propia identidad cuando se ha producido una sustracción violenta. Pero la obra no consigue emocionar, para mi el problema principal esta en la trama, resulta demasiado previsible desde el principio, y el final excesivamente rocambolesco, mas propio de un culebrón que del drama de robo de bebes que se nos esta planteando. La dirección es correcta pero abusa un poco de los fundidos en negro, los actores que dan vida a los cuatro protagonistas son realmente los que salvan la obra especialmente Carlos Álvarez-Nóvoa y Asunción Balaguer, muy bien también Ruth Gabriel, en cuanto a Liberto Rabal le faltan todavía muchas tablas.
Se deja ver, pero es una pena que se desaproveche la oportunidad de tratar de forma seria un tema todavía sin resolver en nuestra sociedad actual.
"Una vida robada" es un texto de Antonio Muñoz de Mesa, la obra tiene como fondo la trama real de los bebes robados en España entre los 60 y los 90. Luz (Ruth Gabriel) llega a la casa del doctor Nieto (Carlos Álvarez-Nóvoa) buscando una verdad que acabará trastocando a todos. Olvido (Asunción Balaguer) es la encargada de velar por el doctor y sus secretos y por último Julio (Liberto Rabal) el hijo del doctor. Se trata pues de explorar el tema de la propia identidad cuando se ha producido una sustracción violenta. Pero la obra no consigue emocionar, para mi el problema principal esta en la trama, resulta demasiado previsible desde el principio, y el final excesivamente rocambolesco, mas propio de un culebrón que del drama de robo de bebes que se nos esta planteando. La dirección es correcta pero abusa un poco de los fundidos en negro, los actores que dan vida a los cuatro protagonistas son realmente los que salvan la obra especialmente Carlos Álvarez-Nóvoa y Asunción Balaguer, muy bien también Ruth Gabriel, en cuanto a Liberto Rabal le faltan todavía muchas tablas.
