
La adaptación de una novela para llevarla a escena siempre resulta difícil, en este caso la historia principal a quedado bien definida, y se entiende perfectamente, pero parece mas una sucesión de escenas o postales, donde sientes que te faltan detalles y personajes, mas que un texto dramático, falta un poco de fluidez que haga de todo un conjunto homogeneo.
En cuanto a la escenografía resulta original con los acordeones como único elemento escenográfico. Los actores en general están correctos, con algunos altivajos interpretativos, pero en general resuelven de forma solvente. El vestuario y la iluminación completan perfectamente el conjunto. En cuanto a la música, el acordeon también resulta omnipresente, para mi resulta excesivo, porque reconozco que la música de acordeon me satura con mucha facilidad.
Resulta valiente subir a escena una obra que hable de estos temas,aunque se haga de forma tímida, y se nota que no es fácil, ni para el que lanza la propuesta ni para el que la recibe, pero creo que es conveniente hablar y debatir de las cosas para poder superarlas, por tanto resulta interesante.