lunes, 6 de julio de 2015

EL CIELO QUE ME TIENES PROMETIDO
Obra escrita y dirigida por Ana Diosdado que muestra el lado mas humano de Teresa de Jesús, en concreto se centra en su relación con Ana de Mendoza, princesa de Éboli. Las dos tenían un fuerte carácter y tuvieron numerosos conflictos, especialmente cuando Ana de Mendoza se queda viuda y decide ingresar en un convento de las carmelitas con sus criadas, pero sin cumplir las reglas de la orden. El texto trata de recrear como pudo ser el último encuentro entre las dos. 
La obra comienza cuando Teresa de Jesús llega al convento de Pastrana para asegurarse que todas las religiosas han sido trasladadas y que allí solo queda Ana de Mendoza con sus criadas. 
En un espacio practicamente diáfano vemos primero a Teresa, a la que da vida María José Goyanes, en una magnifica interpretación, como reflexiona sobre su vida antes de encontrarse con la princesa de Éboli. En su ensoñación oye poemas que recita la cálida voz de Emilio Gutiérrez Caba (siempre un placer oírle recitar). La acompañan en escena Irene Arcos que interpreta a Ana de Mendoza, una mujer atormentada tras la muerte de su marido y que esta estupenda en el duelo que mantiene con Teresa de Jesús y Elisa Mouliaá, Mariana una joven y dulce criada de la princesa que aporta un toque de frescura y de inocencia. 
Una visión diferente de unas mujeres con mucha personalidad, una obra curiosa e interesante, con un hermoso toque poético.
TRIUNFO DE AMOR
La compañía Nao d'amores se enfrentan en esta ocasión a la dramaturgia de Juan del Enzina (1468-1529) poeta, músico y autor teatral del Renacimiento español. Como dramaturgo está considerado iniciador y patriarca del teatro español. Nao d'amores, que desde hace catorce años esta especializado en investigar y difundir el teatro barroco, enfrenta este reto de representar a Juan del Enzina, el gran autor dramático del Renacimiento español, el mas famoso, aquel que rompería los moldes del teatro cortesano condicionando toda la escena posterior. "Triunfo de Amor" es un espectáculo construido a partir de diversos textos dramáticos y líricos de este autor. Consiguen de nuevo resucitar un teatro con el que redescubrimos a estas criaturas escénicas que, bajo la máscara del pastor, viven su pérdida de libertad subyugadas ante el poder de ese Amor que nos gobierna. Un amor que destruye a veces de manera catastrófica, pro que también nos puede hacer mejores. 
Como siempre Ana Zamora nos deleita con un espectáculo hermoso, poético, tierno y divertido, donde cuidada la puesta en escena con mimo, desde la sencilla escenografía, hasta la preciosa música interpretada en directo, sin olvidar, por supuesto, la perfecta iluminación. Pero lo que acaba de redondear el espectáculo son sin duda los seis interpretes, Eva Jornet, Rodrigo Muñoz, Isabel Zamora, Sergio Adillo (que esta divertidísimo de pastor), Javier Carramiñana (impresionante Cupido) e Irene Serrano (llena de encanto, gracia y seducción). 
Que delicia dejarse seducir por Nao d'amores, que experiencia tan atractiva y fascinante, que deleite para los sentidos, todo un regalo.

domingo, 5 de julio de 2015

EDIPO REY
La tercera propuesta del Teatro de la Ciudad es Edipo Rey.
Alfredo Sanzol dirige Edipo Rey a partir del texto de Sófocles. Edipo, feliz rey de Tebas tras vencer con su ingenio a la esfinge, tiene que enfrentarse ahora a la peste que asola la ciudad. La solución es descubrir al asesino de Layo, esposo de Yocasta y rey de Tebas antes de su llegada. Edipo decide "ocuparse del asesinato de Layo como si fuera el de su propio padre" y comienza una investigación en la que ira descubriendo como va desmoronándose su propia historia. Como dice el propio Sanzol "Edipo no puede parar. Tiene que saber quién fue el asesino de Layo. Y Edipo descubrirá que él mismo fue el asesino. Y descubrirá que Layo era su verdadero padre. Descubrirá que Yocasta, la mujer con la que ha tenido cuatro hijos, es su madre, su verdadera madre. Edipo descubrirá que su grandeza tenía pies de miseria. Que su historia es la del hombre que lo era todo, y descubrió ser menos que nada. La historia del hombre que por salvar la ciudad, se hundió a si mismo. La historia del hombre que al descubrir la verdad decidió no volver a ver la luz". "Ciudadanos de Tebas, mirad, éste es Edipo. Y no consideréis feliz a ningún mortal hasta contemplar su última hora. Hasta que haya traspasado el umbral del final de su vida sin haber sido alcanzado por el dolor." 
La propuesta de Alfredo Sanzol es arriesgada, en el escenario practicamente a oscura, una bombilla verde sobre una mesa puesta para cinco comensales, preparada para una "última" cena. Un montaje estático, una representación despojada de movimiento donde los absolutos protagonistas son los actores y con ellos el texto con el que nos narran la historia, los hechos y sus consecuencias. Pero la propuesta, que a priori es muy sorprendente, funciona muy bien, gracias sobre todo a los cinco fantásticos protagonistas. 
Juan Antonio Lumbreras que da vida a Edipo, con su aspecto de hombre corriente, estupendo como siempre, con esa mirada intensa que dice tanto y ese narrar sereno y firme, Paco Déniz que da vida a un Creonte solido y contundente que impone su presencia por derecho propio, Elena González que encarna varios personajes (Tiresias, un mensajero, Antígona y el heraldo), esta especialmente emocionante, con la voz casi rota, en el papel de Tiresias cuando cuenta la destrucción que ya ha visto. Natalia Hernández junto a Eva Trancón componen un coro maravilloso, lleno de preguntas y de angustias, y que lucen igualmente por separado Natalia Hernández desdoblandose en varios personajes (sacerdote, coro, corifeo, Ismene y siervo) sobresaliente cuando como sacerdote angustiado cuenta la tragedia de Tebas y Eva Trancón espectacular en el papel de Yocasta, tan afligida intentando salvar a Edipo de conocer una verdad que a ella misma horroriza. 
Una propuesta impactante para disfrutar de un convite de autentico lujo, una gran tragedia contada de forma distinta pero con la misma intensidad y energía gracias a cinco impresionantes actores que consiguen trasmitir toda la fuerza del relato.
Merece la pena visitar esta propuesta y dejarse seducir por este Edipo Rey.

jueves, 2 de julio de 2015

MEDEA
Formando parte también del proyecto del Teatro de la Ciudad esta Medea. 
Andrés Lima compone Medea a partir del texto de Séneca así como de otras fuentes que tratan también el mito de Medea. El comienzo es impactante, un grito desgarrador que parece surgir de las profundidades del teatro, en un teatro practicamente a oscuras. Del fondo del escenario surge la voz de un narrador (el propio Andrés Lima) que comienza a narrar fragmentos de la Teogonía, ...al principio todo era caos, vacío sin forma... y nos habla de la Tierra y de los dioses, de diosas como Hécate y de sus sacerdotisas, entre las que estaba Medea, de estirpe de reyes y dioses, hija de Eetes rey de la Cólquida y sobrina de Circe diosa y hechicera. Entonces aparece Aitana Sánchez-Gijón que encarna a Medea, espléndida y terrible, arrastrando con ella toda la furia y todo el dolor del mundo, "no hay mayor dolor que el amor", ella que todo lo hace por amor, un amor sin medida. 
Por amor traiciona a su padre y mata a su hermano, por amor acabará matando a sus hijos y por amor, en definitiva, lo perderá todo. Todo por Jasón un hombre que la amó, la utilizó y ahora solo la desprecia. 
En escena Aitana no esta sola, la acompañan Laura Galán su nodriza, la cantante Joana Gomila que actúa de corifea y Andrés Lima que actúa de Corifeo, de Creonte y de Jasón. 
Sin duda la que lleva todo el peso de la representación es Aitana Sánchez-Gijón, que esta absolutamente inmensa, se deja la piel y consigue llevarte al corazón de su pasión y de su tormento, te hace sentir todo el dolor que la rompe por dentro. Es una pena que algunas intervenciones, especialmente las de Lima, rompan ese climax, creo que la obra hubiera ganado mucho dejándolo en un monologo, donde Aitana diera rienda suelta a su torrente interpretativo, a ese desgarro que te estremece en la butaca. 
Aunque la obra tiene algunos momento que distraen un poco, merece la pena acercarse a disfrutar de Aitana Sánchez-Gijón, esta Medea turbadora y apasionada que grita su desesperación con esa voz rota que surge de lo mas profundo de sus entrañas. Esta sencillamente fabulosa.